sábado, 8 de noviembre de 2014

You promised me Mars colonies. Instead, I got CEDRO

Hace tiempo que quiero escribir un post que refleje la sensación de decepción que siento al ver en qué se está convertiendo Internet, y la nostalgia por el espíritu de los años ochenta.

Recuerdo como en los años ochenta mi amigo Miguel y yo saboteábamos la caja de conexiones de Telefónica del edificio para obtener alguna línea de teléfono libre (sí, aquí libre significaba gratis) a la que conectar un módem y explorar las posibilidades de las BBS, las primeras páginas web (a base de carácteres ASCII) antes de que existieran las páginas web, antes de que existiera Internet.

Después todo fue muy rápido, las primeras tarifas planas, los primeros navegadores, el correo electrónico, Terra, Altavista, Google, las ADSL. Facebook, los smartphone...

¿Pero qué queda del espíritu innovador y revolucionario de los años ochenta? Es realmente decepcionante ver en qué se ha convertido Internet y la informática en general. Lo que tendría que haber sido una herramienta de revolución cultural (por primera vez en la historia de la humanidad tenemos la posibilidad de acceder a toda la cultura a un coste cero) se convierte, se pervierte, día a día en un espacio de banalidad consumista, controlado por enormes corporaciones que sólo piensan en hacer dinero.

Qué sentir si no cuando aparecen novedades como por ejemplo PhotoMath, una aplicación para móviles que resuelve ecuaciones con sólo fotografiarlas:



Es impresionante la enorme inversión tecnológica requerida para desarrollar esta aplicación: Analizar la imagen, convertirla en carácteres, convertir estos carácteres en una ecuación matemática, resolver la ecuación... Y todo para nada. Un ejemplo más de ciber-banalización cultural: “¡Hey! ¡Mira! ¡Una nueva cosa más que no tienes que aprender! ¡Waw! ¡A este paso pronto no hará falta saber nada! ¡Gracias Internet!”

Pero el ejemplo anterior es solo un ejemplo frívolo de algo más grande, más profundo.Os recomiendo la lectura del artículo “Why We Can’t Solve Big Problems” de Jason Pontin en la revista MIT Technology Review (Noviembre/Diciembre 2012). 

http://www.technologyreview.com/featuredstory/429690/why-we-cant-solve-big-problems/
La portada de la revista es ya demoledora y anticipa un artículo sensacional: Un primer plano del rostro envejecido y melancólico de Buzz Aldrin, el astronauta del Apolo11 que puso los pies en la luna en 1969, y una frase: “You Promised Me Mars Colonies. Instead, I Got Facebook”. Es la imagen de la decepción de ver en qué ha quedado el espíritu de la generación que puso un hombre en la luna. 




La revolución tecnológica de la segunda mitad del siglo XX se ha olvidado de resolver los grandes problemas de la humanidad pues la tecnología ha quedado en manos de grandes corporaciones económicas que sólo piensan en su interés económico.

Por ejemplo, no se trata de producir una vacuna contra el SIDA, sino de producir un producto para que los enfermos de SIDA (ahora “clientes”) tengan que comprar el resto de sus vidas siempre que tengan suficiente dinero para ello. No se trata ya de producir una mejor semilla de cereal, se trata de forzar a los campesinos (ahora “nicho de mercado”) a comprar un tipo de semilla patentada que resista mejor los fertilizantes y pesticidas químicos que la propia industra fabrica... Y así hasta la náusea.

En el mundo educativo y del aprendizaje en el que yo me muevo la decepción se manifiesta en ver que treinta años después el acceso a los contenidos culturales continua siendo un “Big Problem” sin resolver, por culpa de los intereses bastardos de instituciones empeñadas en impedir el acceso libre a la cultura.

En La Vanguardia del día 5/11/2014 aparece la siguiente noticia: “Condena a la UAB por las fotocopias para los alumnos”


Como suele pasar, el demonio está en los detalles, y la noticia en La Vanguardia, así en pequeño no muestra los detalles de lo que aparentemente es una honesta reivindicación de los autores de texto sobre sus legítimos derechos de autor.

En  www.diario.es encontramos un artículo “El tira y afloja entre los derechos de autor y el derecho a la educación” en el que se profundiza en este caso:


Y nos encontramos con una entidad llamada “CEDRO” que en la mejor tradición siciliana clásica,

a) Se autoproclama poseedora de todos los derechos de todos los autores existentes o imaginables, sin importar que muchos autores de los materiales que esta universidad cuelga en su campus virtual sean los propios profesores que deciden ofrecer estos materiales gratuitamente.(Ellos deciden que en realidad los profesores lo hacen bajo la coacción de los rectores, pues es de suponer que no les entre en la cabeza que nadie quiera compartir algo gratis si puede pedir algo a cambio).

b) Determina por su cuenta que el precio de estos materiales del campus virtual de la universidad son 5 euros al año por estudiante. ¿Y porqué 5 y no 10? ¿o 428? No se sabe. El principio del atracador es “esigí sin especificá” como diría Maki Navaja, “El último choriso”.

c) Que ellos mismos son los legítimos recaudadores de esta cantidad, sin que se sepa, claro está, cómo se va a repartir tanto dinero entre sus socios, si es que se reparte de alguna manera.

d) Y que si no se paga los cinco eurillos de ná, pues se “[...]obliga a la universidad a retirar de su campus virtual los textos que ofrece a los alumnos para su descarga directa[...]”. ¡De TODOS los textos!. Y sólo falta añadir “y que los universitarios tomen los apuntes con un puto boli BIC como se ha hecho toda la vida”.

Lo terrible del caso es que semejante institucion esté respaldada por los jueces y por el sistema político, cuando aún es reciente el nivel de corrupción y desverguenza torera que alcanzó la SGAE, otra institución recaudatoria de derechos de autor de infausto recuerdo.

 Lo terrible del caso es ver la cantidad de peajes se van poniendo en la autopista al futuro que era Internet.

jueves, 30 de octubre de 2014

Corrupción política y Campana de Gauss. Ejemplo práctico en Badalona.

Uno de los aspectos más oscuros y extraños del currículum de las matemáticas de nuestro país es su absoluto desprecio por la probabilidad y estadística. Parece que el supuesto énfasis de las matemáticas “competenciales” en la aplicabilidad de los contenidos se reduzca a las “matemáticas del paleta” y las “matemáticas del supermercado”, es decir, calcular baldosas y porcentajes de descuento, unas matemáticas de chichanabo que no son atractivas ni para el más vago de la clase.

Mientras tanto, nuestros alumnos llegan a la universidad sin haber estudiado ni una puñetera hora de probabilidad y estadística en el bachillerato, pues desde hace muchos años la estadística está desterrada de la selectividad (un antiguo acuerdo tácito de la época en que los estudiantes catalanes sólo tenían tres horas de matemáticas a la semana, que se ha mantenido en la actualidad aunque tengan cuatro).

A nuestros alumnos de bachillerato, incluso en la rama social, se les somete a una sobredosis absurda de sistemas de ecuaciones, matrices y análisis mientras que se les mantiene en la más absoluta ignorancia sobre la que es la función matemática más poderosa de la historia, la función que realmente gobierna el mundo: La distribución normal:


Y su forma gráfica: La campana de Gauss:

Un ejemplo de su poder lo encontramos en la noticia del diario “El Periódico de Catalunya” del 29/10/2014:


http://www.elperiodico.com/es/noticias/barcelona/ola-acusaciones-tongo-examen-policia-badalona-3569873


“Ola de acusaciones de tongo en el examen de la policía de Badalona”

Algunos aspirantes al cuerpo de la policía municipal de Badalona, indignados por las extrañas preguntas a las que habían sido sometidos:

[...]«Algunas preguntas eran imposibles de responder. Por ejemplo, qué porcentaje de paro juvenil hay en Europa según una información que publicó la edición digital de El País el pasado mes de marzo», recuerda uno de los denunciantes. El examen se realizó el pasado 1 de septiembre. Había pasado, pues, medio año.[...]

Decidieron realizar un sencillo estudio estadístico sobre los resultados obtenidos en el examen los 670 aspirantes. Y este fue el resultado, tal y como recoge la noticia del periódico:



Efectivamente, aparece la forma típica de la distribución normal, con su forma de campana, centrada alrededor de 6 respuestas correctas... Excepto por una anomalía en la parte de la derecha, Oh! Seis candidatos obtuvieron puntuaciones “estratosféricas”, casi perfectas, entre 17 y 20 respuestas acertadas.

Y, sí, amigos, nadie escapa al poder de la campana de Gauss: un simple acceso a los DNI de estos seis iluminados candidatos ha destapado, una vez más, la cruda realidad de la corrupción política en nuestro país:

[...]Sospechan que a esos seis talentosos aspirantes a agente de la policía municipal les une algún tipo de relación de parentesco con empleados municipales. Según las pesquisas llevadas a cabo por EL PERIÓDICO a raíz de esas denuncias, así es. Dos de ellos son hijos de dos de los actuales escoltas personales del alcalde, Xavier García Albiol (PP). Otros tres son hijos de otros agentes de la Guardia Urbana. En el sexto caso bajo sospecha ha sido imposible de momento verificar una relación de parentesco.[...]

El artículo también nos ofrece una mini lección de estadística preciosa:

[...] El problema en toda polémica de estas características es establecer dónde está la frontera entre lo normal y lo insólito. Uno de los denunciantes se ha tomado la molestia de analizar estadísticamente los 670 resultados a través de la técnica gráfica de la campana de Gauss. Así se aprecia perfectamente lo desconcertante de los resultados del examen. Entre las seis mejores notas y el resto se abre un abismo. La campana de Gauss es una buena herramienta para detectar anomalías estadísticas, y esta lo es.[...]

Ante la aplastante contundencia matemática sería divertido si no fuera tan triste (sobretodo para los desafortunados candidatos que estudiaron de forma honesta sin saber que la prueba era para amigos y familiares) escuchar la defensa de los responsables políticos, que son saben bajo qué piedra esconder su verguenza:

[...] La defensa de la pulcritud del proceso la realiza, en nombre del Ayuntamiento de Badalona, la concejala del PP Maria Jesús Hervàs. Antes que nada, es casi obligado hacerle antes una pregunta. ¿De qué nacionalidad es Cate Blanchett? Hervàs se queda atónita. Duda. «No sé, es de Estados Unidos..., o tal vez inglesa». La mayoría de los aspirantes a guardia urbano tampoco supieron que la respuesta correcta era australiana. Es un consuelo menor. Hay que suponer que los hijos de los escoltas y de los otros tres agentes que aprobaron casi sin mácula lo sabían.
Hervàs explica que el examen es responsabilidad de un tribunal externo y con una mecánica de elaboración del cuestionario que lo blinda contra las filtraciones. ¿Por qué, entonces, se produce esa sospechosa coincidencia de parentesco? Según la concejala, no hay que menospreciar el peso de la tradición familiar, es decir, que la vocación de los aspirantes viene de lejos, y que al igual que los hijos de médicos puede que también sean médicos, los de policías municipales también siguen los pasos de sus padres. Hervàs subraya su tesis con un dato. No es la primera vez que los hijos de escoltas del alcalde ganan unas oposiciones a agentes de policía de Badalona. Sucedió también -dice- cuando la socialista Maite Arqué era alcaldesa. Como colofón añade que también el sobrino de un actual concejal socialista está entre los 12 aspirantes que han superado las pruebas. No quiere con ello acrecentar las sospechas. Sugiere solo que los aprobados estudiaron más y mejor, tal vez porque supieron antes que habría oposiciones.[...]


miércoles, 15 de octubre de 2014

Primeros detenidos de Al-Gebra

Me llega via Google+ (https://plus.google.com/+MarcusBennettamouse) que se han producido las primeras detenciones de miembros de Al-Gebra.




Se recomienda a todos aquellos que posean material potencialmente peligroso (tratados de álgebra, libros de matemáticas no competenciales...) que se dehagan de ellos antes de que las autoridades educativas y didácticas los detecten.

jueves, 9 de octubre de 2014

Incompetencias básicas: Matemáticas y Ébola

La Vanguardia del dia 2 de octubre trae una editorial titulada “La política, como las matemáticas”, que empieza con la siguiente cita a Kennedy:

Edward Kennedy pronunció la siguiente sentencia en el Senado estadounidense:”La política es como las matemáticas, todo lo que no es totalmente cierto está mal”.

Me gusta esta cita porque muestra el valor más precioso de las matemáticas: el amor por la exactitud, la pasión por la rigurosidad, la exigencia incansable de la máxima precisión.

Yo tendría unos quince años cuando llegó a mis manos por primera vez un libro de matemáticas: “Álgebra” , de Roger Godement, un densísimo “tocho” de álgebra del 1965 que todavía no sé a santo de qué disponía la biblioteca pública de Esplugues.

El libro era un buen ejemplo de estructuralismo, muy en la línea dura Bourbaki, en donde cada definición y cada teorema tenía que estar perfectamente justificado por los anteriores, formalizando todo el álgebra sobre la teoría de conjuntos.

Recuerdo en particular la definición de grupo, alrededor de la página 120 (sí, eran necesarias más de 100 páginas de teoría de conjuntos para poder definir con propiedad lo que es un grupo)

“un grupo es un conjunto A junto con una ley de composición que cumpla las condiciones a, b y c (asociativa, existencia de elemento neutro y existencia de elemento simétrico)”

Esta definición venía acompañada de una nota de advertencia, que en la edición española decía algo así como:

“el principiante se cuidará de no decir que un grupo es un conjunto en el que exista una ley de composición que cumpla las condiciones a, b y c, pues se puede demostrar fácilmente que en cualquier conjunto existe una ley de composición que cumpla estas condiciones, y estaríamos diciendo que un grupo es cualquier conjunto”.


Recuerdo como yo me esforzaba en entender el sentido de aquella advertencia leyendo una y otra vez las dos frases, que para mí eran prácticamente sinónimas mientras que para el autor del libro significaban la diferencia entre todo y nada, algo como de vida o muerte.

Aquello era rigurosidad, y aunque de aquel libro no entendía ni la mitad de las cosas, sentí que si aquel señor había dedicado tanto esfuerzo en especificar y matizar cada concepto, las matemáticas tenían que ser algo que valiera la pena.

Lo que aquel autor quería dejar claro era que para definir un grupo era necesario un conjunto de elementos y también tener definida la manera como estos elementos interactúan entre ellos. Las dos cosas.

Porque resulta que matemáticamente es posible asignar a cualquier conjunto de elementos unas reglas de interacción que satisfagan las condiciones de grupo. Y por lo tanto si dices que un grupo es un conjunto de elementos en el que exista una ley de composición que cumpla las condiciones, entonces no estás diciendo nada, pues en todo conjunto imaginable existe seguro al menos una ley así.

Intentaré explicarlo con un ejemplo práctico de actualidad:

Para tener un equipo médico bacteriológico para tratar enfermos con ébola, NO es suficiente con disponer de un conjunto de enfermeros y un conjunto de trajes protectores, confiando en que los trajes dispongan de algún tipo de manual de instrucciones. No. También es necesario detallar como todos estos elementos interaccionarán entre sí, especificando todo con rigurosidad, con exactitud matemática, pues el más mínimo fallo puede tener consecuencias catastróficas.


Porque se puede demostrar matemáticamente que cualquier conjunto de enfermeros, junto con cualquier conjunto de trajes protectores, sin más ni más, forman estructura de equipo bacteriológico, que sí, pero a costa de tener una chapuza de equipo, con las consecuencias de todos conocidas.

Esto con Bourbaki no pasaba.

jueves, 25 de septiembre de 2014

Catalunya vs. Navarra (libros de texto)

El libro de texto en papel no es en sí mismo un producto obsoleto. Nuestros jóvenes se pasan cada día más tiempo delante de una pantalla, y no es descabellado imaginar un futuro en el que se reivindiquen las virtudes del libro en papel, o imaginar un futuro en el que la sociedad reivindique para las escuelas y institutos ser espacios “sin pantallas”, el único espacio en el que nuestros jóvenes experimenten con papeles, lápices, tijeras... (¿acaso ese momento no ha llegado ya?)

Lo que es inaceptable y éticamente aberrante es el negociete, el chiringuito lucrativo que tienen montadas las editoriales alrededor del libro de texto, libros de texto de una penosa calidad y a un precio desorbitadamente absurdo, distribuidos a las familias mediante compras masivas en el mes de junio ¡antes de acabar el curso anterior!, aprovechándose de la buena voluntad desinteresada de las AMPAS, saltando las pequeñas librerias de barrio que tendrían que ser las distribuidoras naturales de estos libros.

Lo vergonzoso no es el absurdo volumen de libros que compran las familias catalanas cada año, muchas veces con un esfuerzo económico muy importante, lo vergonzoso es que, para mayor gloria de la cuenta de resultados de las empresas editoriales, las familias tienen que comprar los libros cuando todavía no se han definido las necesidades educativas de sus hijos, convirtiendo el libro en la negación directa de toda posible adaptación curricular.

El negocio de los libros de texto se encuentra, al menos en Catalunya, en un estado patético, moribundo, y supone una pesada rémora en el progreso educativo.

La Vanguardia del dia 6/9/2014 ofrece una noticia “Los libreros catalanes denuncian regalos de editoriales a profesores para que escojan sus libros de texto” que es todo un homenaje al despropósito.

Las editoriales nos denuncian a nosotros los profesores por aceptar “todo tipo de artículos” a cambio de escoger los libros de texto... de una determinada editorial. Y lo sueltan en los medios de comunicación a las bravas, poniendo en entredicho la honradez del profesorado, en vez de denunciar y publicar el nombre de esas editoriales y de qué regalos se trata.

Yo en quince años en Ensenyament no he visto nunca semejante práctica. Hace años era común ofrecer junto a los libros uno o dos ordenadores portátiles para el departamento, o un cañón proyector, o una pizarra digital, pero estos materiales siempre quedan en el instituto como material de uso pedagógico, nunca para uso personal. (me acuerdo de un caso hace años en un instituto de la Costa Brava en el que el cap de departament tenía el ordenador portátil en casa para jugar a la butifarra “online”, pero fue un caso aislado)

Otra práctica que denuncian es la compra de packs de libros: Los libros de todas las asignaturas de una única editorial a cambio de importantes descuentos. Es sencillamente indignante que las propias editoriales denuncien la estrategia de aumentar beneficios a costa de inflar pedidos cuando esta estrategia es la norma en el sector desde siempre.

Por poner un ejemplo, los libros de matemáticas de la editorial Santillana se ofrecen en tres volúmenes independientes para cada trimestre escolar, “Motxilla lleugera” (mochila ligera), sin embargo es totalmente imposible la compra de uno de estos volúmenes por separado, se tienen que comprar los tres a la vez, aunque a lo mejor el tercer volumen no se llegue a utilizar nunca por el motivo que sea.

Es interesante observar que esta situación no se produce en otras zonas de España. Leyendo el artículo “Nueve de cada diez centros optan por mantener los mismos libros de texto pese a la LOMCE” del periódico navarro “Diario de Notícias” (11/9/2014), se nos presenta una situación totalmente diferente. Las escuelas y institutos navarros reciben una dotación económica cada cinco años para comprar los libros de texto y una dotación menor anual para reponer el porcentaje de libros deteriorados. A cambio, los institutos se comprometen a mantener estos mismos libros al menos cinco cursos, un compromiso que les lleva incluso a rechazar el cambio de libros que (supuestamente) implica la nueva ley educativa LOMCE. Un sistema claro y transparente en el que cada uno (profesorado, administración pública, editorial...) asume su parte de derechos y responsabilidades.

Un detalle que encuentro muy significativo: En La Vanguardia se dice “[...] en ocho años el libro de texto se ha encarecido casi un 40% [...]”, y uno no entiende el motivo de semejante aumento, pero en el diario de Navarra se afirma al final “[...] hemos perdido un 40% de facturación anual [...]”. Ah! eso sí, eso ya me lo creo. No hace falta tener un MBA en ESADE para entender que no es lo mismo un encarecimiento del 40% que una pérdida de facturación del 40%, aunque son dos conceptos que se suelen confundir, sobre todo cuando se trata de dinero público.

jueves, 4 de septiembre de 2014

Nou currículum de matemàtiques de Catalunya

Acaba d'aparèixer una modificació al currículum oficial de Matemàtiques a Catalunya, que detalla l'apartat dedicat als percentatges:

Apartat 7.3. Els percentatges.

- L'u per cent. L'u per cent al llarg de la història. Casos famosos d'u per cent. Normes, valors i actituds relacionats amb l'u per cent.

- El 2 per cent. El 2 per cent al llarg de la història. Casos famosos de 2 per cent. Normes, valors i actituds relacionats amb el 2 per cent.


- El 4 per cent. El 4 per cent al llarg de la història. Casos famosos de 4 per cent. Normes, valors i actituds relacionats amb el 4 per cent.

- El 5 per cent i percentatges superiors. El 5 per cent i percentatges superiors al llarg de la història. Casos famosos de 5 per cent i percentatges superiors. Normes, valors i actituds relacionats amb el 5 per cent i percentatges superiors.

miércoles, 6 de agosto de 2014

martes, 22 de julio de 2014

Las listas negras de ANELE

Este anuncio a toda página de La Vanguardia del dia 22/4/1977 (pàgina 3) nos muestra un tiempo en el que el negocio de los libros de texto era legítimo y honesto, ofreciendo productos con publicidad en la prensa, competiendo en calidad y innovación educativa.

 Todo lo contrario de lo que es actualmente: una industria obsoleta que sólo se mantiene en vida por la enorme subvencion de dinero público que recibe, el dinero que los padres dedican cada año en comprar los libros de texto para sus hijos, directamente o indirectamente  mediante cheques educativos.

La Asociación Nacional de Editores de Libros (Anele) se encuentra en pie de guerra porque la llegada de la nueva ley educativa LOMCE (La ley Wert) se está encontrando con la insumisión de muchas de las CC.AA. en la renovación de los libros de texto. Muchas CC.AA. se niegan a obligar a los padres a cambiar todos los libros de texto porque esta nueva ley sólo afecta al temario de unas pocas asignaturas. Y esto, claro está, va en contra de los intereses de los editores.

Es realmente interesante ver como funciona la política comercial de los libros de texto escolares. Dentro de un sistema de libre mercado como el nuestro, podríamos suponer que los editores tendrían que vender sus productos, los libros de texto, con publicidad, mostrando sus excelencias y ventajas respecto a los de la competencia y al hecho de no comprarlos. Y con la misma ingenuidad podríamos suponer que estos productos, los libros de texto, se venderían en librerias, donde se muestran estos libros, los puedes coger, ojear, comparar en contenido y precio...

Pues no. Nada de esto pasa en el negocio de los libros de texto escolares. El negocio de los libros de texto se realiza en los pasillos y despachos del poder político.

Podemos leer en El Pais (6/7/2014) “José Moyano [Presidente de Anele], ha remitido un informe a la Vicepresidencia del Gobierno, en el que se señala que ocho de las 17 comunidades autónomas están recomendando a los colegios que no cambien los libros de texto y que, por lo tanto, se empleen manuales no adaptados a la nueva ley educativa”. Así funciona esta gente, remitiendo informes directamente a la vicepresidencia de la nación con “listas negras” de comunidades sumisas y insumisas. No sabemos el tono con el que se presentó, si fue con altaneria “semelosobligueacomprarlibrosnuevosperoya” o más suplicante “vicemiraestosquenocompranlibrosnuevosdilesalgojopelines”.

En el diario El Mundo (20/7/2014) leemos más declaraciones de José Moyano: «El ministro tiene un problema de liderazgo y no le siguen ni las comunidades del PP. Esto es un caos», denuncia José Moyano, presidente de la Asociación Nacional de Editores de Libros (Anele), «preocupado» por cómo va a repercutir la situación en el sector. «Es la primera vez en la Historia de España que un cambio normativo no viene acompañado de un cambio de libros de texto». Este señor debe ser realmente poderoso para atreverse a señalar con el dedo así tan farruco a todo un ministro. Porque no estamos hablando de industrias importantes como la automovilística, ni estratégicas como la de armamento, estamos hablando de unos señores que fabrican unos libros escolares en la era de Internet.

Lo más triste de todo es que, como suele pasar en toda industria subvencionada, no ha tenido la más mínima necesidad de innovación, con el resultado penoso de quedarse totalmente descolgada de la revolución digital de los últimos veinte años, con productos que no son ya atractivos para nadie, ni alumnos, ni padres ni profesores (¿alguien conoce algún docente que valore positivamente el libro de texto?)

En una entrevista pasada a la revista Eroski, el señor José Moyano nos ofrece toda una declaración ética: “Nos preocupa que las políticas de gratuidad generen una impresión a la población de que todo es gratis. No valorar el libro, la creación o los derechos de autor es una política nefasta que hace un daño enorme y que perjudica en lo más identitario de nuestro país que es nuestro patrimonio cultural.”

Leemos en El País (9/1/2014): “En 2004, recuerda [Moyano], el ejecutivo socialista paralizó con un real decreto el calendario de aplicación de la Ley Orgánica de la Calidad de la Educación (LOCE), aprobada cuando gobernaba el PP y que no llegó a aplicarse. Esto supuso un perjuicio que Anele calcula en 50 millones de euros para el conjunto del sector porque los libros ya habían sido impresos, incluso distribuidos en parte. El Estado tuvo que compensar a las editoriales que reclamaron judicialmente por responsabilidad patrimonial."

Ya vemos como las gastan esta gente. O compramos sus libros por las buenas, o nos los harán pagar a las malas "por lo penal". ¿hasta cuando?









domingo, 20 de julio de 2014

Cirax (los propedeuticos)

En los años ochenta fueron lo más. Recibieron muchos nombres: Los Yuppies, la Jet, la "gente guapa"... Joaquin Sabina les escribió la canción "todos menos tú" en la que quedaban retratadas todas aquellas tribus

 

Se reconocían fácilmente por su estética, por como hablaban y como vestían, pues la estética lo era todo.

De aquellos yuppies me acuerdo yo cuando como profesor de matemáticas me llegan emails como el siguiente


Invitando a unas jornadas "especialmente dirigidas al profesorado vinculado con asignaturas propedeuticas de matemáticas". No te rias que tú tampoco sabes qué es "propedeutico", que igual que yo tendrás que buscarlo en la Wikipedia y ni así te quedará claro...

Todo es tan complicado y a la vez tan simple...









viernes, 20 de junio de 2014

Disparateología educativa


Cuando uno abre un diario supuestamente serio como es La Vanguardia y lee un artículo como este "De móviles y profesores" (22/5/2014) de Anna Pagés (Profesora(!) de la facultat de Ciències(!) de l'Educació(!) Blanquerna-URL) que comienza así:

"Los profesores pueden sufrir a veces de una vanidad profesional que les hace creer que tienen algo que decir digno de la atención de sus alumnos. Según esta vanidad, la primera obligación del alumno, lo que debería definirlo, es ser un sujeto que atiende a su profesor.[...]"


Uno se pregunta seriamente si las llamadas "ciencias de la educación" consisten en "a ver quien dice el disparate más grande".

Afortunadamente para nosotros, la disparateología no es algo nuevo, otros antes que nosotros han analizado este fenómeno. Un experimento magnífico realizado a principios de los años 90 es el famoso Caso Sokal.


Josep Font  reflexiona sobre el caso Sokal y su relación con la educación en  ¡Bravísimo! (en el blog nomolestesmiscirculos), una lectura muy recomendable que nos puede ayudar a no dejarnos confundir entre lo que es ciencia de lo que no es ciencia ni lo será nunca.






domingo, 15 de junio de 2014

¿Es la expresión “aprender a aprender” una tautología?

Por fín, ¡aleluya! via Google+ y gracias a Josep Font, podemos acceder a un interesantísimo debate sobre si la quinta competencia básica, la famosa "aprender a aprender" es o no una tautologia.

http://www.ceide-fsm.com/2013/04/es-la-expresion-aprender-a-aprender-una-tautologia/

La cuestión no es baladí, pues es una de las ocho competencias básicas que según la Comunidad Europea han de definir la educación presente y futura, como los diez mandamientos de Moisés.

Este debate se desarrolla dentro del campo de la filología, lo que en mi opinión acentúa aún más la falta de espacios de debate educativos y didácticos sobre temas tan fundamentales como este. Sin debate, sin intercambio de ideas, estamos condenados a contruir un entorno educativo sobre auténticas chorradas, del calibre de "el profesor tiene que ganarse su autoridad", por poner un ejemplo.







sábado, 7 de junio de 2014

Matemáticas para ricos, matemáticas para pobres

Por fin una plataforma para el aprendizaje de las matemáticas realmente moderna, propia del siglo XXI. Varios medios de comunicación hablan maravillas de Smartick, un espacio virtual para que los niños puedan aprender matemáticas a su ritmo, desde su propia casa. Incluso el telediario de TVE hace eco de esta iniciativa


Sus creadores han copiado el espíritu de las fichas en papel Kumon en un entorno online, y el resultado parece fantástico a juzgar por lo que se puede leer en su página web:

"¡Tu hijo ya puede aprender matemáticas desde casa! Smartick, el método de aprendizaje y refuerzo de las matemáticas que usan los alumnos del Siglo XXI. Sólo necesitas un ordenador o una tableta y acceso a Internet."

"El mejor método para estudiar matemáticas según los expertos."

"¡Aprender a pensar... eso son las verdaderas matemáticas!"

"Las matemáticas no son sólo cálculo mental. Smartick va mucho más allá... el alumno aprende a pensar y a razonar. En el Plan de estudios de Smartick los problemas de lógica y razonamiento tienen un peso muy relevante, enseñando al alumno a pensar mientras ejercita y mejora su comprensión lectora."

"¡El programa se adapta al alumno, no al revés... y en tiempo real!"

"Smartick se adapta a cada alumno, dejando atrás el aburrimiento. Ejercicios a medida en función de su ritmo y capacidad individual, manteniéndolo en la frontera de su máximo nivel de competencia. Siempre desde el refuerzo positivo."

"Sólo 15 minutos al día y sin desplazamientos ni horarios. Con Smartick sólo se necesitan 15 minutos al día para que el alumno desarrolle las capacidades hasta su máximo potencial.  Desde cualquier dispositivo con conexión a Internet y a cualquier hora del día."

"El alumno trabaja de forma autónoma... olvídate de corregir los ejercicios cuando llegas a casa del trabajo. No pierdas tiempo en correcciones. El alumno se conectará a Smartick desde donde quiera, hará sus ejercicios, y sabrá de inmediato los fallos que va cometiendo, sin interiorizar errores.  Benefíciate de un aprendizaje más rápido y eficaz."

Pero lo que me deja de piedra es el precio que le han puesto a esta maravilla:


Un mínimo de 19.90€ euros ¡AL MES! ¡POR ALUMNO! (y esto en tarifa de grupo y anual). Vaya, que por menos de 200 euros al año ni te molestes en llamar. ¿Sólo la clase alta podrá disfrutar de entornos de aprendizaje modernos? 

Este no es el futuro que yo quiero, ni como profesor de matemáticas ni como ciudadano. Cuando todavía estamos luchando para superar la frontera tecnológica del papel al digital, algunos ya pretenden "colonizar" el mundo digital para mayor gloria de su cuenta corriente. Pretenden hacer del mundo digital un mundo de colonizadores y colonizados, pretenden quedarse con nuestro oro (la cultura) a cambio de sus abalorios digitales. Pretenden, finalmente, que a medida que vayamos saliendo del pasado analógico y entremos en el futuro digital, nos encontremos (ay!) con un peaje que solo deje entrar a una minoria de clase alta.

Como diría el de Xàtiva,

jo dic no,
diguem no.
Nosaltres no som d'eixe món.











jueves, 29 de mayo de 2014

Matar al libro de texto (Enrique Dans)

Enrique Dans reflexiona sobre un tweet que circula sobre el contenido de un libro de texto de la editorial Anaya:

El problema aquí no está en que se relacione piratería de barcos o aviones con "piratería" de películas, sino en la forma tan mezquina de hacerlo, en un libro de texto para niños.






domingo, 25 de mayo de 2014

Quo Vadis Matemática

El curso va acabando y por nuestro departamento no ha pasado ningún comercial de editorial a ofrecernos ningún libro de texto. ¡Bien!  ¿Tal vez las editoriales no tienen ninguna novedad, ninguna nueva idea de cómo mejorar en el aprendizaje de las matemáticas? ¿O tal vez estamos ante el final de esta bizarra forma de distribución de libros mediante la visita de comerciales a los institutos?

El único comercial que ha aparecido por nuestro departamento nos ha dejado una muestra de cuadernos de actividades de matemáticas con el único objetivo de mejorar los resultados en las pruebas de Evaluación diagnóstica y las pruebas PISA.


 Nadie engaña a nadie, la portada lo dice bien claro:



Cuatro cuadernos, de primero a cuarto de ESO que sólo contienen exámenes, exámenes y más exámenes, preguntas y más preguntas de respuesta rápida, numérica o "tipo test" para su corrección automática por parte del propio alumno o del profesor. Nunca había visto nada más triste, nada menos motivador,  cuadernos sin índice, sin estructura, sin vida, sin alma. Mientras, Internet es actualmente un hervidero de ideas y propuestas llenas de color y totalmente gratuitas. ¿Hasta cuando seguiremos subvencionando con el dinero de los padres estos productos decimonónicos? 

No podemos echar las culpas a las editoriales. Sólo son negocios que miran por sus intereses económicos a corto plazo, detectan un nicho de mercado (profesorado agobiado por mejorar en las clasificaciones de las pruebas de final de etapa) y ofrecen un producto. Aquí la corte de expertos educativos universitarios no se pronuncia. ¿Qué opinan los gurús de la didáctica sobre estos "productos" editoriales? No contestan, están muy ocupados buscando en qué piedra esconder su desvergüenza, esclavos de su propia verborrea retórica en la que no cabe nada más que culpabilizar al profesorado.

Conocimiento, cultura, aprendizaje, son conceptos que hay que dejar colgados en la percha antes de entrar en clase cuando lo único que importa es mejorar en la clasificación de resultados en unas pruebas estandarizadas y estandarizantes. Qué futuro más gris nos espera por este camino.

En Internet podemos encontrar iniciativas como Badass (algo así como Profesores Cabreados, nacida en EEUU, donde el superar o no una prueba de evalución diagnóstica puede significar el cierre de una escuela) que defienden una experiencia docente fuera del dictado de las pruebas estandarizadas de evalución 









miércoles, 14 de mayo de 2014

Pequeñas comunidades donde dos y dos no sean cuatro

El diario La Vanguardia del lunes 12/5/2014 nos ofrece un nuevo ejemplo de disparate para mayor gloria de la pseudociencia de la Educación y la didáctica. Como siempre, todo se reduce al iluminado experto en educación que baja de los cielos universitarios a decirnos a nosotros, pobres profesores de secundaria y primaria, que no tenemos ni idea de dar clase de matemáticas.




En este caso el disparate llega al delirio cuando este “experto” en educación matemática afirma que “Es necesario que el alumno dialogue consigo mismo y con sus compañeros creando pequeñas comunidades de aprendizaje, donde dos más dos es mayor que cuatro.

Afortunadamente hemos de suponer que semejante disparate es fruto de la diarrea intelectual propia de esta pseudociencia de la Educación y la didáctica, en la que puedes decir una cosa, la contraria y el mayor de las estupideces y quedar igual de bien. Suponer lo contrario, nos llevaría al mundo de Orwell y 1984, “La Libertad significa libertad para decir que dos más dos son cuatro. Si eso se admite, todo lo demás se da por añadidura” escribía Winston en su diario...


Afirma este iluminado que “Tenemos que volver a los orígenes, cuando la matemática resolvía problemas concretos de la vida diaria y nos ayudaba en nuestro quehacer”. Oh, sí. Y el arte, en sus orígenes, era pintar en la pared de una cueva con un palo untado en mierda. ¿Y qué? ¿Acaso hemos de volver a las cavernas para reducir el nivel de fracaso escolar? ¿Acaso se resolvería si lo hiciéramos?

Y sigue en su delirio: “Recordemos que la palabra cálculo quiere decir “piedra”, y las piedras fueron las primeras calculadoras que utilizaron nuestros antepasados.”. Oh! Sí, y los primeros coches se movían con los pies, que yo también he visto los Picapiedra. No se pueden decir más tonterías por pulgada de papel.


El remate, después de la obligada apelación a la vía power-flower de la matemática recreativa, llega cuando sentencia: “Nuestros alumnos tienen que comprender lo que enseñan para enseñar a comprender”.




sábado, 5 de abril de 2014

Gifs animats amb Mathematica (2)

Aquest nou gif animat que he fet l'he titulat "Petit tomàquet fa un passeig pel hort toroïdal".




Tot plegat amb només cinc línies de codi Mathematica:

Fotograma1:=ParametricPlot3D[{(3+Cos[v])Cos[u],(3+Cos[v])Sin[u],Sin[v]},{u,0,2Pi},{v,0,2Pi},PlotStyle->RGBColor[0,1,0,.5],Mesh->None]
Fotograma2[a_]:=Graphics3D[{PointSize[0.05],Red,Point[{(3+Cos[a])Cos[a/4],(3+Cos[a])Sin[a/4],Sin[a]}]}]
Fotograma[a_]=Show[Fotograma1,Fotograma2[a]];
Film=Table[Fotograma[a],{a,0,8Pi,8Pi/50}];
Export["c:/mathematica/film3.gif",Film]


 El més divertit és anar fent petites modificacions al Fotograma2, anar alterant la trajectòria del punt i veure que surt.  




miércoles, 2 de abril de 2014

Titulars de vergonya

Llegim a La Varguardia del 1/4/2014




La memorización deja a España a la cola de la OCDE en habilidades prácticas

España necesita un "cambio radical" de métodos docentes para que el alumno no sólo memorice, dice la secretaria de Estado de Educación


El Ministerio de Educación y la OCDE atribuyen a un sistema de enseñanza basado sobremanera en la memorización que el alumnado español de 15 años esté a la cola en la resolución práctica de asuntos de la vida real como manejar un dispositivo mp3, interpretar un mapa o comprar un billete de tren.
España necesita un "cambio radical" de métodos docentes para que el alumno no sólo memorice, sino que aplique los conocimientos a tareas prácticas complejas, ha dicho la secretaria de Estado de Educación, Montserrat Gomendio.



Però de quina memorització parlen? Ni els professors més vells de l'institut més conservador recorden un ensenyament basat en la memorització! La memorització està totalment desterrada del sistema educatiu des de fa moltíssims anys.


Quines dades tenen per a poder afirmar que "La memorización deja a España a la cola de la OCDE en habilidades prácticas"?  Tenen alguna dada objectiva per recolçar aquest titular? Una sola, només una?

Com pot ser que encara hi hagi gent que pagui 1.30€ per llegir notícies tan poc fonamentades?

Aquesta notícia és, o bé una mostra del més que penós nivell de qualitat de la premsa actual, o bé deixa en evidència a les autoritats educatives, o totes dues coses alhora.

I finalment, deixa en evidència l'autoanomenada "ciència" de l'educació o la "ciència" de  la didàctica, amb tota la seva corte d'"experts" i "gurús", un terreny on qualsevol pot dir una cosa i la contrària i quedar igualment bé, com els pitonisos que tiren el tarot en la televisió de madrugada.









 

Gifs animats amb Mathematica

El programa Mathematica permet generar gifs animats amb una facilitat realment sorprenent. Jo mateix en cinc minuts i quatre línies de codi:

Fotograma1[a_] := Graphics[Plot[Sin[x], {x, -Pi, Pi},PlotStyle -> {RGBColor[0, 1, 0]}, PlotRange -> {-1, 1}]];
Fotograma2[a_] := Graphics[{AbsoluteThickness[2], AbsolutePointSize[8], RGBColor[0, 0, 1], Point[{a, Sin[a]}]}];
Fotograma[a_] = Show[Fotograma1[a], Fotograma2[a]];
Pellicula = Table[Fotograma[a], {a, -Pi, Pi, 2*Pi/100}];
Export["c:/mathematica/hola.avi", Pellicula]


he generat aquest gif animat


Pot ser realment interessant jugar a ser "director de cine" matemàtic generant petites pel·lícules on visualitzem objectes o propietats matemàtiques.

A més a més, els gifts animats tenen l'avantatge de què són relativament petits (aquest ocupa 303kb) i , a diferència de Flash, no necessiten cap plataforma extra per ser visualitzats.



lunes, 24 de marzo de 2014

Motivació i desmotivació (2)



El dissabte passat el diari El País treia un article sobre la cara oculta de Silicon Valley:


Aquest article mostra les desigualtats econòmiques que s’amaguen darrera de la imatge aparentment idíŀlica de Silicon Valley, aquest El Dorado tecnològic, on tenen les seves seus Google, Facebook, Microsoft, etc, etc...

Malauradament ens tocarà llegir molt sobre les repercussions socials i econòmiques d’una revolució tecnològica com la que vivim actualment, amb empreses que, com fa poc Whatsapp, “valen” milers de milions però només donen feina a trenta o quaranta treballadors. Aquest article no és ni el primer ni serà l’últim.

El que em va atreure d’aquest article són les Matemàtiques. No les veieu? Estan ben presents. Les Matemàtiques, les matemàtiques de veritat, amb majúscula, les que valen la pena, estan de forma discreta, en un segon pla, sense el més mínim desig de tenir  protagonisme.

Observeu la segona fotografia que il·lustra aquest article, on veiem un grup d’alumnes a l’aula d’un institut de 1972, amb el seu professor, i on apareix un Steve Jobs adolescent. Es pot veure sobre la pissarra una maqueta gegant d’un regle de càlcul.






El regle de càlcul va ser, fins a finals dels anys setanta i l’arribada de les modernes calculadores digitals de butxaca, la màquina calculadora per excel·lència. Allò que qualsevol enginyer portava a la butxaca. Allò que tot estudiant de matemàtiques havia d’estudiar i dominar. I “només” consistia en dos trossos de fusta encaixats, lliscant l’un dintre de l’altre, amb unes escales logarítmiques dibuixades. La cosa menys digital i menys moderna que te’n pots imaginar.

M’imagino que la regla de càlcul gegant que veiem a la fotografia era un model a escala que el professor utilitzava per ensenyar el seu funcionament a tota la classe.

Utilitzar un regle de càlcul no és com polsar botons d’una calculadora. La seva utilització implica coneixement dels logaritmes i la seva propietat més importat: la de passar productes a sumes, sumes que es poden “mecanitzar” amb el moviment lineal d’una fusta. I és que resulta que el regle de càlcul és una eina estrictament analògica, sense la menor component digital.

Així podriem dir que la revolució digital va néixer en un lloc molt concret, Silicon Valley, en un moment històric molt concret, principis dels anys setanta, amb una generació  de joves innovadors com Steve Jobs, Steve Worniak o Bill Gates... que van rebre una formació matemàtica estrictament analògica.

Poques vegades al llarg de la història una generació de joves ha viscut un canvi tecnològic tan radical en tan poc temps com aquella. I si gurús mediàtics com Steve Jobs van tenir èxit va ser perquè darrera d’ells treballaven joves enginyers, molt menys mediàtics, com Steve Wozniak, que van poder assimilar i dominar aquestes noves tecnologies digitals en temps mínims. I això va ser, sens dubte, gràcies a la qualitat de la seva formació matemàtica. Perquè la tecnologia pot ser analògica i el mes següent digital, però la matemàtica és la mateixa: rigor, disciplina, ordre, lògica, llenguatge simbòlic...

Tot això jo personalment com professor de matemàtiques ho trobo molt motivador.

En canvi, no trobo la menor motivació en unes “matemàtiques” , (en minúscula entrecomillades, en cursiva...), de les competències bàsiques, i de les proves avaluadores de competències. És més, les trobo realment desmotivadores.

Dels Estats Units que ens arriben veus crítiques, veus que denuncien el risc d’acabar ensenyant “només per a la prova”.



Veus que s’atreveixen a clavar l’ungla al cartró-pedra de la matemàtica “happy-flower” que només busca (i a sobre no aconsegueix!) reduir el nivell de suspesos a base de “baixar el llistó”.