Caminos del exilio educativo ¿Ira o ironía?

 Nos llegan noticias del nuevo bachillerato LOMLOE. Resulta que la modalidad "Bachillerato Artístico" se escindirá en dos: "Bachillerato artístico para artes escénicas" y "Bachillerato artístico para artes musicales", porque no es lo mismo querer ser actor que querer ser músico.

Se espera para la próxima ley educativa nuevas modalidades para diferenciar entre bachillerato musical para vientos y para cuerdas, o modalidades de bachillerato diferenciadas para danza y mimo.

Naturalmente, nadie se plantea que, para ser músico o actor, para tocar la tuba o para bailar el lago de los cisnes, lo importante es tener una buena, buenísima cultura general, es decir, un bachillerato único para todos, sean futuras ingenieras o prometedores poetas.

Pero esto, tú ya lo sabes. Como lo saben todos los padres sensatos que, más allá de escoger entre este o aquél bachillerato de mierda, ya se cuidarán muy mucho de que sus hijos tengan un buen nivel cultural.  y no olvidemos que la cultura está al alcance de todos, a coste cero (siempre, eso sí, fuera de las escuelas e institutos públicos).

Lo que no sabemos aún es como digerir todo esto, como aceptar la derrota. Las dos vías clásicas son la ira y la ironía. Por la vía de la ira (y la ironía) vemos a un lúcido Jordi Martí en su bloc "Xarxa Tic":

Para lo que me queda en el convento…

Dice Jordi Martí que le da igual, que se la suda. Y nos remite a unas noticias que aparecen en la prensa. Y a continuación nos explica como poder acceder a estas noticias sin ser suscriptores al diario,  mediante no sé qué técnica de "VPN on line" para poder saltarse las protecciones del periódico.

¡Qué ironía! Hemos pasado del tiempo en el que los profesores nos enterábamos de las novedades educativas por la prensa (señal clara de que importábamos poco o nada) al tiempo en el que tenemos que hacer de hackers-blasters para poder acceder a esas noticias, señal clara de que importamos una mierda absoluta.

Nos dice Jordi que "Si me dicen que debo rezar en clase o abrazar árboles, los intentaré abrazar con el mejor cariño posible. Eso sí, en mi horario laboral. Esas 37,5 horas por las que me pagan. Lo demás, pues que se jodan. Si no funciona el sistema, pues no funciona."

La americanización del sistema educativo sigue imparable: (Re)convertir la profesión docente en un "Mcjob" más, en un trabajo-basura, con profesionales que aguantan dos, tres, cuatro años a lo máximo, explotados en un trabajo "para pagar facturas" mientras aparece una alternativa laboral más digna. No hay más.